sábado, 8 de enero de 2011

Para empezar

Una recomendación importante (para empezar) a los (potenciales) lectores: No hacerse a uno mismo lo que uno nunca le haría a los demás.
Que es una interesante y poco practicada versión de la Regla de Oro.
Ojo, pues, al masoquismo.
Y a quedar atrapado por "lo que uno debe hacer".
Y a quedar (aún más) atrapado por el "personaje" o los "personajes" que representamos, y que lo están viviendo y vampirizando a uno, simplemente por inercia, o por un falso sentido del deber, o por miedo, o por...
A ver, que uno tiene, al menos, tanto derecho como el prójimo a la propia consideración.
Y punto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario